Psiquiatría y humanidades

La enfermedad bipolar en el músico Robert Schumann.

“La música de Schumann es una revelación”, Johannes Brahms

En los últimos años se ha profundizado notablemente en el análisis de la personalidad, y en el estudio de las historias clínicas de grandes artistas que sufrieron perturbaciones mentales. Es así como ha sido posible comprender la biografía de genios como Van Gogh, Mahler, Hemingway, William Blake, Berlioz, Frida Kahlo, etc.

El género ha sido abordado a lo largo de la historia de la psiquiatría, y recordamos con especial admiración la obra “Genio y locura”, del gran Karl Jaspers, abordando los estudios patográficos del dramaturgo sueco Strindberg, del pintor Van Gogh, del científico  místico Swedenborg, y del poeta  Hölderlin.

La trágica existencia del músico alemán Robert Schumann (1810 – 1856), puede ser mejor comprendida, así como las características de su obra, y las distintas etapas creativas, a la luz de un análisis clínico retrospectivo de su vida, ligándola con la evolución de sus graves desequilibrios.

El trastorno afectivo bipolar de Schumann, se ve dramáticamente graficado en estudios que registran la relación entre sus estados anímicos y su productividad creativa. Sus altibajos, el tránsito de la euforia a la tristeza, muestran una fuerte relación con su obra. Evidentemente compuso más en los estados de hipomanía y menos en los de depresión.

Robert Schumann es uno de los músicos que encarnan más intensamente el espíritu del Romanticismo. La introspección, el estudio de todos sus fenómenos internos, le proporcionó los datos fundamentales de su creación. Su música es reveladora de lo oculto, incluso lo inconsciente. Toda su obra puede ser considerada, en efecto, como una confesión.  Schumann,  quien, además era  poeta, introdujo en  la música las tendencias que el Romanticismo alemán tenía incorporadas a la producción literaria.

No hay una historia de amor más hermosa que la de Robert Schumann y Clara Wieck. Además de ser la más célebre y romántica, también es la más tempestuosa y torturada. Cuando Robert conoció a Clara, ella tenía 9 años edad, y él 18. No pasó mucho tiempo para que Schumann notara y comenzara a admirar las increíbles dotes de pianista de la niña, la cual estaba siendo preparada por su padre, Friedrich Wieck, profesor de piano de Robert. Cuando ella llegó a los 16 y él a los 25, se dieron cuenta que estaban enamorados.

La agonía, las angustias, las presiones duras de aquellos años, que llegaron a pesar inexorablemente en la vida de Schumann desaparecieron. Los primeros años fueron de perfecta felicidad, años de creaciones musicales sin par. En uno solo de estos años, compuso para su esposa 150 canciones, amén de otras grandes composiciones. Ambos crecieron artísticamente, ella llegó a ser la más grande pianista de su generación, él uno de los mejores compositores del Romanticismo. Ya no se conformó con las composiciones para piano. En el mismo año de su matrimonio se dedicó a la música vocal, después a la orquestal y a la música de cámara. En los siguientes tres años completó 30 obras mayores, la mayoría de ellas obras maestras.

La ternura y dedicación de Clara no fueron suficientes para contrarrestar su patología. Los trece años que vivió junto a ella, con la que tuvo ocho hijos, se vieron empañados por hondas depresiones, síntomas neuróticos que arrastraba desde la adolescencia, y continuos cambios de humor. La euforia hiperactiva y la melancolía paralizante hacían difícil e inestable la vida a su lado.

La muerte de su querido amigo Felix Mendelssohn lo sumió en una nueva y oscura crisis. Consumido por la tristeza, solo rescataba el “maravilloso sufrimiento” que le producía escuchar algunas melodías. Tras un intento de suicidio lanzándose al Rhin, fue internado en una clínica para insanos en Endenich. Allí pasó los dos últimos y tristes años de su existencia. Su muerte, a los 46 años, fue el alivio definitivo para años de tormento.

 
Por Francisco Vergara López
Médico Psiquiatra y Magíster en Humanidades, Departamento de Psiquiatría y Salud Mental UdeC

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